la cultura norteamericana III

Hombres del sur de África en el sur de Norteamérica.

Tataranietos (o La parte maldita).

Extraído de Photoshop Aesthetics, K. Lee Matthews.

la cultura norteamericana II

los besos en América se salivan con semen

las felaciones ocurren
en palabras de amor

Obra: Sobre un fotograma de The Brown Bunny, de Vincent Gallo.

la cultura norteamericana I

a medida que crecía comenzaron a aparecerme
una especie de apéndices llamados familia.
todo comenzó a empeorar al tiempo
que mi grado de consciencia
de las cosas aumentaba.

la perspectiva tan grande:
tengan cuidado con la eclíptica al entrar en las habitaciones.
se corre el riesgo de salirse.

la prueba de sus juventudes. a la temprana edad de 6 ya se uniformaban. a los 9 comenzaron a posar en formación cuadrangular. y esto ocurría así siempre.

los salvajes son gente alegre que juega muy bien al dehuntshigwa'es. el dehuntshigwa'es es un deporte de salvajes. parece que su alegría, que la alegría de Águila Blanca (White Eagle), depende en buena medida de sus triunfos en el mismo. tengo la certidumbre de que si acaparamos esta clase de juego de salvajes nuestra gente también estará alegre y, además, ello nos reportará pingües beneficios. todo pasa por eliminar cualquier rasgo identitario que los salvajes aporten al juego. ellos lo llaman dehuntshigwa'es pero creo adecuado utilizar el nombre de lacrosse.

el barro cómo salta cuando pisas el suelo
se escapa de tu huella,
triunfa en el empeine, en la suela, en el borde
muere cuando llora el grifo del lavabo

Extraído de Enseres (El grifo), de N. Minunt.

Expolio del drácula (portazgo)

vemos un perro de escayola, un bolso oscuro tirado en el suelo, una copa de vino caro

vemos 7 velas directamente y 4 más reflejadas en el suelo, estantes con gafas o coches de colección, apoyados casi verticalmente

vemos un retrato que no incluye a Charlotte Corday, un tijeretazo y dos pinzas que se prolongan como una columna hacia lo alto.

Expolio del drácula, de J. L. Pomona

Our song

"Si río a carcajadas de piedra /
Si moriré o no /
Si la sombra de la puerta /
me deja pasar, me sujeta y me pincha. /
Si salto en los zapatos colándome por la empuñadura /
Si duelo al reto /
a que bañe su sangre con goce a mi sudor. /

Si quiero ser todos por una mañana /
Si hay sol de brujas, si eres melindre y requiebro, si no te has lavado los pezones /
de eso que se retuerce en el cable amarillo /
Si fuerzo las ganas al padecimiento /
Si no tengo molinos /
Si no tengo puentes /
si escribo contraseñas /
[...] son passwords que olvido /
(porque nunca anoto), /
si soy números de teléfono y dientes de carnet de conducir /
si me echas de más /
si me acerco, cuando me alejo /
y ocurre una canción que, plegada sobre sí misma, /
me explica tus trenes."

J. L. Pomona.